Primeros alimentos sólidos: ¿cuándo, cómo, cuáles y por qué?

Bebé explorando alimentos sólidos mediante la técnica BLW

Lo que necesitás saber:

  • A partir de los 6 meses, se inicia la alimentación complementaria con alimentos sólidos ya que la alimentación láctea sola no llega a cubrir todos los nutrientes que requiere el bebé.

  • Comenzar progresivamente incorporando variedad de alimentos en pequeñas porciones.

  • Ofrecer diferentes texturas y consistencias.

  • Generar un ambiente agradable para el niño y el cuidador.

Introducción

La incorporación de los primeros alimentos sólidos es un momento muy esperado y que despierta gran interés familiar. Es una etapa importante en la transición de la alimentación láctea (ya sea lactancia materna, fórmulas para lactantes o ambas) a la alimentación familiar. Por eso también se la llama alimentación complementaria, ya que cumple la función de complementar la alimentación láctea que el niño/a que continúa recibiendo con otros alimentos diferentes a la leche.

En la alimentación complementaria, se adquieren hábitos alimentarios, convirtiéndose en un momento de la vida clave para sentar las bases de una alimentación completa, saludable y adecuada.

¿Cuándo es el momento ideal de iniciar?, ¿Qué debo ofrecerle a mi bebé? ¿Cómo debo introducir los alimentos?

A continuación, encontrarás las respuestas.

¿Cuándo?

El inicio de la alimentación complementaria es alrededor de los 6 meses.

En ese momento el niño/a ya ha incorporado o comienza a incorporar algunas pautas que indican que ya está listo/a para comenzar como se sienta solo, realiza movimientos de masticación, mejora el control de su lengua y labios, hay crecimiento dental. Además, las funciones de su cuerpo están maduras para recibir otros alimentos.

¿Qué?

A parir de los 6 meses la alimentación láctea necesita complementarse con otros alimentos para ir de apoco avanzando hasta llegar a la mesa familiar.  Es una etapa de conocimiento y exploración de lo que rodea al bebé.  Los alimentos que se seleccionen deben ser de buena calidad nutricional, que brinden la energía y nutrientes necesarios para este período de crecimiento. Es importante resaltar, los niños/as dependen estrechamente de las decisiones de sus cuidadores adultos y la elección de los alimentos que éstos hagan para ellos. Las comidas que vayan a ser incorporadas con mayor frecuencia serán parte de los hábitos alimentarios del niño. No hay un esquema rígido de incorporación de alimentos. La clave está en ofrecer una alimentación variada y progresiva que incluya vegetales, frutas, carnes/huevo, almidones, legumbres, lácteos, grasas de buena calidad. Elegir agua como bebida que acompañe a esas comidas. Ofrecer comidas mixtas y variadas, es decir no solo a base de vegetales, sino combinados con carnes, huevo y aceite vegetal. Evitar agregado de Sal y Azúcar a las preparaciones, así como alimentos con forma esférica como lentejas, arroz, aceitunas, tomates cherry (ofrecerlos pisados/cortados). No olvidar, cocción adecuada de los alimentos y lavado frecuente de manos.

¿Cómo?

Mediante una alimentación perceptiva. Esto quiere decir que para generar buenos hábitos o patrones de alimentación que se mantengan en el futuro además de ofrecer alimentos nutritivos, se debe generar un ambiente agradable para el niño/a y el adulto encargado de la alimentación que favorezca la interacción, el desarrollo del lenguaje y la regulación de hambre y saciedad.  Es ideal que no haya distractores a la hora de la alimentación como todo tipo de pantallas o dispositivos. Tener en cuenta que al principio la cantidad aceptada por tu bebé será muy pequeña, quizás apenas algunas cucharadas. Alimentar despacio y pacientemente y animar al niño/a a comer, pero sin forzarlos.  Experimentar con diversas combinaciones, sabores, texturas y métodos para animarlos a comer.

Resumiendo

A la hora de empezar con alimentos distintos a la leche humana o a las fórmulas infantiles, se deben contemplar las siguientes premisas:

  • Generar un ambiente agradable para el niño y el cuidador.

  •  Comenzar progresivamente incorporando variedad de alimentos en pequeñas porciones.

  • Ofrecer diferentes texturas y consistencias.

  • Evitar agregar sal y azúcar a las preparaciones.

  • Ofrecer agua como bebida.

  • Evitar alimentos con forma esférica como lentejas, arroz, aceitunas, tomates cherry (ofrecerlos pisados/cortados)

  • No forzar a completar o terminar la ración servida.

  • Evitar dispositivos distractores, pues es importante la conexión con los alimentos

  • Asegurar cocción completa de alimentos como carnes y huevos y evitar la contaminación cruzada.

  • Lavado de manos y superficies.

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