El/la bebé recién nacido/a tiene un estómago pequeño, por lo que necesita despertarse durante la noche porque sólo puede tomar una pequeña cantidad de leche cada vez que lo hace. Necesita alimentarse en intervalos regulares durante el día y la noche para asegurarse de que se cumplan sus necesidades nutricionales.
Saber que despertarse por la noche para amamantar es positivo para tu bebé, y que es la norma biológica, muchas veces, la falta de sueño puede ser un verdadero reto para muchas familias. Puede resultar difícil si el bebé o la bebé se despierta más de lo deseado, o si se trata de un/a bebé más grande que se despierta más de lo que esperabas.
Algunas familias pueden pensar que su bebé está preparado/a para interrumpir algunas tomas nocturnas o dejar de darle el pecho por la noche. Lo mejor es abordar cualquier cambio de forma gradual y respetuosa, para que puedas mantener la importante y estrecha conexión con tu bebé por la noche. A medida que tu bebé crezca, vas a descubrir formas de responder a sus necesidades nocturnas que pueden no incluir ofrecerle el pecho en todo momento. Por ejemplo, podés probar otras cosas, como mecerlo o acariciarlo antes de dárselo. Puede que al principio no funcionen, pero con el tiempo, a medida que tu bebé se desarrolle, vas a descubrir que en algunos casos le dan tranquilidad y le devuelven el sueño.